El pasado 10 de Enero y estrenando el 2016 fuimos al Karting Granada a echar un día con los amigos. Era la primera vez que me pasaba por allí y la verdad es que el circuito me gustó bastante. Pequeño, ratonero y con unas instalaciones muy buenas. Cuando terminen una pasarela de madera en construcción que pasa por encima de la pista tiene que ser una gozada para los espectadores.
Lástima que como me ha pasado otras veces la recta principal estaba a contraluz, pero afortunadamente el día se portó y las nubes me dejaban moverme con libertad por el circuito. De hecho el tiempo estuvo de lujo. Aplazamos el día de karting programado para el día anterior por la amenaza de lluvia (yo prefiero siempre estas cosas en sábado, y el domingo dedicarlo a descansar y pasar tiempo con la familia) y el domingo acertamos con el clima. Nadie diría que estabamos en Enero. Junto a una sierra que en estas fechas suele tener mucha más nieve, con una manga corta y una sudadera nos bastó como ropa de abrigo. Como siempre, monopié con el 400 con la 7D y la ya veterana 40D con el 70-200. Por la distancia y el tamaño del circuito podría haber pegado el día con el copito solamente, pero el 400 fijo me encanta. Calidad, desenfoque, nitidez… Es cierto lo que muchos comentan de las focales fijas. Una vez las pruebas…
Este primer día me ha servido para pillar muchas referencias del circuito, y así cuando vuelva ya saber por donde meterle mano. Como todos los circuitos, sean de karts, coches, motos o minimotos todos tienen sus puntos clave donde podemos ver mucha pista, pillar alguna cruzada, derrapada o levantada de pata. En este caso con los karts todo funciona de otra forma. Como ya he comentado en el blog en alguna entrada estos pequeños cacharros tienen muchas particularidades a la hora de hacerles foto.
Las ruedas muy pequeñas giran a mucha velocidad, por lo que nos permiten tirar a velocidades superiores a las que se suele hacer en otras disciplinas sin miedo a congelar las ruedas. Si queremos alguna toma a la altura del casco del piloto nos veremos obligados a agacharnos bastante, y al no tener una gran superficie cubierta el foco se puede ir de donde queremos muy rápido. Yo siempre trabajo en enfoque puntual y seleccionando el punto que deseo según la toma (ya sea frontal o un barrido lateral). Normalmente busco o el portón lateral o frontal o el casco del piloto. Esto mismo unido al ángulo muy cerrado de la mayoría de las curvas hace por ejemplo que los barridos sean algo más complicados que con los coches.
En resumen, un día de lujo con amigos en un circuito en el que no había estado y al que me gustaría volver. Y espero que este 2016 sea bastante más prolífico en pruebas que este pasado 2015, en el que por motivos laborales y personales no he pisado tanta cuneta como me hubiera gustado. Os dejo con algunas fotos del día. Un saludo y hasta la próxima entrada.